Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.
-
Proyecto
button
La Serranía y La Ermita
Un nuevo centro urbano sostenible en Marbella, con énfasis el sector terciario, transporte sostenible y actividades diversas.
En concurso público se adjudicó al Estudio el Plan de Sectorización y Ordenación del Sector de La Serranía y el Estudio de Ordenación del Sector La Ermita, lo que se tenía que presentar de forma diferenciada, pero desde la consideración de que había que plantear su posible interrelación como posibilidad de liberar el espacio del Sector La Ermita, planteando las posibilidades de traslado de las edificaciones de carácter industrial existentes en el mismo al sector La Serranía.
Todo ello de forma justificada y analizando las posibilidades reales, de que tal traslado se pudiera llevar a cabo.
Desde esta perspectiva, en primer lugar, estudiamos el proyecto del Sector La Serranía, ubicado en la zona norte de los proyectos planteados, en unos terrenos que tienen acceso fácil desde la carretera de Monda-Coín y también, aunque más difícil, por la complejidad de las obras a realizar, desde la Autovía del Mediterráneo y por encima del Centro Comercial La Cañada y el núcleo residencial situado al oeste de este conjunto comercial.
El lugar es estratégico para implantaciones logísticas y de usos terciarios, y aunque la topografía es difícil, la ordenación es bastante respetuosa con el medio ambiente, dejando libre de edificación todos los espacios naturales de su entorno. Este planeamiento desarrolla una superficie aproximada de ochenta y tres hectáreas y un techo edificable del orden de doscientos noventa mil metros cuadrados, lo que permite llevar a cabo el traslado planteado de las edificaciones existentes en los terrenos del Sector La Ermita. Las edificaciones propuestas son de diseño actual y con posibilidades de gran versatilidad funcional, lo que le confiere más el aspecto de un Parque Industrial actual, enriqueciendo la arquitectura de esta zona de esta ciudad.
Esta ordenación de usos productivos se ha diseñado como un reto a la sostenibilidad, concibiendo el conjunto desde la consideración de que todos los elementos urbanísticos y edificatorios son definidos desde su adecuación al medio ambiente, sin que por ello renunciemos a los objetivos urbanísticos y arquitectónicos planteados para su desarrollo, para el que se ha planteado edificar con la menor ocupación de suelo posible, proponiendo edificios en varias alturas en beneficio del espacio público y de las zonas verdes, y para conferirle un mayor protagonismo al peatón y a los medios de transportes no contaminantes, relegando el automóvil, en la medida de lo posible, a una función secundaria. A partir de estas premisas se proyecta un conjunto multifuncional y complejo en el que la residencia, el trabajo, el comercio y el ocio son las actividades fundamentales a partir de la que se generan unos espacios atractivos y de gran calidad.
En la zona sur de los proyectos propuestos se encuentra el Sector La Ermita, que se extiende desde la Autovía del Mediterráneo hasta la antigua carretera N-340, que actualmente es una calle de esta ciudad, que extendemos hasta el mar. Esta ordenación la desarrollamos estructurada en relación con un eje central, un gran bulevar, que atraviesa el sector de norte a sur, conectándose con la autovía mediante un puente de acceso que también servirá de conexión con el Sector La Serranía, y que relaciona esta ordenación con el mar. Este sector se concibe a partir de un desarrollo de enorme modernidad, de forma que se constituya en la ciudad de Marbella del siglo XXI una nueva centralidad urbana en la que se implanten nuevos usos turísticos y residenciales, hoteleros y comerciales, sociales y asistenciales y de cualquier otro tipo, conformando así un espacio urbano diverso con muy poca ocupación de suelo y con una arquitectura en altura con vastos espacios libres y estancias ajardinadas con una densa vegetación, en el que también concurran centralidades funcionales y de comunicación, de forma que se constituya una unidad urbana con todos sus servicios, y en la que los desplazamientos sean reducidos y la utilización de los medios de transportes contaminantes sea mínima.
Esta propuesta estudia de forma resumida cómo podría llevarse a cabo la viabilidad del desarrollo urbanístico y arquitectónico propuesto, para lo que se plantean unos aprovechamientos urbanísticos suficientes capaces de generar las plusvalías necesarias para poder llevar a cabo esta operación. El aprovechamiento urbanístico público es superior al privado, lo que nos hemos planteado como algo necesario para asegurar la viabilidad de esta operación, siendo el objetivo principal la creación de un nuevo espacio de centralidad urbana en la zona este de Marbella que sea capaz de acoger actividades terciarias de carácter económico y financiero, generadoras de una economía sostenida y estable, complementaria de las actividades turísticas que también se integran en esta ordenación.
La actuación aspira a convertirse en un referente más de la ciudad de Marbella, incrementando así su prestigio internacional, para lo que es absolutamente necesario trasladar el actual polígono industrial de la Ermita al sector de actuación La Serranía, lo que comporta una operación económica que se apoya en el desarrollo del planeamiento de todos los terrenos de esta ordenación.
Este nuevo centro urbano de la ciudad, cuyo desarrollo ocupa una extensión de ochenta y una hectáreas y un techo edificable del orden de cuatrocientos cuarenta mil metros cuadrados, lo planteamos como un nuevo lugar de centralidad urbana, no solo del núcleo urbano de Marbella, sino como un lugar de referencia de la Costa del Sol. En el ámbito se propone una plaza central, en la que se encontraría la estación ferroviaria del tren de la costa que uniría Málaga y que posteriormente serviría para dar servicio al futuro trazado del tren litoral que articulará toda la Costa del Sol occidental. Además se crearía un espacio para albergar sedes administrativas y para el desarrollo de actividades económicas y financieras, creándose un centro de negocios y actividades terciarias que fuera un referente en el sur de Europa, y que se complementaría con actividades turísticas permanentes y estacionales, conformadas por edificios hoteleros y de apartamentos, además de viviendas residenciales de calidad, conformando un conjunto urbano con una rica y variada oferta que genere una ciudad diversa.